Las aseguradoras cambian miles de pólizas para afrontar la desescalada

a desescalada y la adaptación a la nueva situación está propiciando la modificación de miles de seguros, en algunos casos sin coste para el cliente. Esta medida, igual que otras acometidas por el sector para bajar precios, tiene como objetivo prioritario conservar a los clientes en el difícil entorno económico creado por la crisis del coronavirus.

Las compañías ven difícil captar nuevos asegurados este año con una actividad económica de perfil más que bajo y centran sus esfuerzos en mimar a los que tienen para conservarlos.

Buena parte de estos cambios de pólizas se realizan para adecuar las coberturas de las pólizas de al menos una parte de los más de 300.000 establecimientos de restauración que existen en España. La reapertura de los cines, hoteles y un sinfín de actividades que se preparan para reiniciar su actividad tendrá su reflejo también en la actualización de las pólizas.

Cambio de prioridades

Las compañías han modificado sus prioridades de estrategia comercial y desde el estallido de la pandemia han cancelado, o al menos pospuesto hasta final de año, el lanzamiento de los productos que estaban incluidos en su calendario inicial de 2020.

“Estamos muy enfocados en conservar los clientes y para ello estamos ajustando nuestros precios de renovación de las pólizas con facilidades de pago”, afirma Raúl Costilla, director comercial de Mapfre España.

Esta medida es una de las más extendidas, ya que las compañías están dando a sus clientes la posibilidad de pagar su seguro mes a mes sin recargo.

“En el caso de los asegurados que han dejado de pagar la póliza, negociamos con ellos individualmente para adaptarnos a su situación y si, por ejemplo, están en un ERTE, aplazamos el pago hasta que finalice el expediente de regulación de empleo”, explican en una de las grandes aseguradoras.

Para retener a sus clientes, Zurich ha optado por ofrecer ventajas económicas para sus asegurados de coches, comercios y pymes si renuevan sus pólizas.

En el ramo de salud, uno de los más afectados por la crisis sanitaria, las compañías han ampliado tres meses gratis los seguros cuyo funcionamiento se ha visto imposibilitado por la pandemia en los meses de abril, mayo y junio. Es el caso de las pólizas que incluían servicios de fisioterapia, oftalmología o podología. La condición es que el cliente renueve el contrato cuando se produzca el vencimiento.

Sanitas paralizó su actividad comercial en los peores momentos de la crisis sanitaria, pero empieza ahora a reactivarse con el diseño de productos que tienen un fuerte contenido digital, un aspecto que se ha reforzado en todo el sector con la pandemia.

El temor a las consecuencias de la crisis sanitaria, explica Luis Sáez de Jáuregui, director de distribución de Axa, ha llevado también a algunos asegurados a modificar y ampliar el capital que su seguro de vida riesgo pagará a sus beneficiarios en caso de fallecimiento, una situación que se da principalmente para proteger a los hijos ante la desaparición de alguno de sus progenitores.

Costes

Ahora que el colapso de los hospitales remite, las compañías especializadas en el seguro de salud empiezan a pensar en las cuentas pendientes derivadas de la atención a los pacientes del coronavirus.

En los momentos críticos, la Administración canalizó la atención a los pacientes del Covid-19 a través de la sanidad pública, aunque tuvieran contratada una cobertura privada. Esta situación afecta principalmente a las compañías incluidas en los conciertos de Muface, Mugeju e Isfas, que agrupan a funcionarios con posibilidad de optar por la sanidad privada en lugar de la pública.

Las aseguradoras están a la espera de que las comunidades autónomas establezcan las vías y condiciones para abordar estos costes que tendrán que afrontar por la atención a sus funcionarios con coronavirus.

En estas cuentas se incluyen la contraprestación por la utilización pública de los hospitales privados.

Las compañías de seguros que trabajan con centros concertados, al no contar con red propia de hospitales, tendrán que negociar también con ellos, ya que el coste medio por paciente incluido en sus acuerdos de colaboración es muy inferior al que realmente se ha producido en la atención a los infectados por el virus.

Fuente: Elpais.com (12/6/20) Pixabay.com

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